Cuando fue publicada la Norma ISO 26000 en el 2010 surgieron grandes expectativas en relación al crecimiento de la Responsabilidad Social (RS) en organizaciones y empresas en el mundo.
Expertos y representantes de organizaciones del sector público y privado, así como organismos de normalización se dieron cita en el foro convocado por la Organización Internacional de Estandarización (ISO) realizado en Ginebra, Suiza para analizar avances, además realizaron un taller para países en desarrollo.
El evento congregó a más de 300 personas y dio espacio a la presentación de experiencias de las organizaciones y de las empresas que ya implementaron la norma, así se dio la sinergia de aprendizaje y detectar oportunidades de mejora, esta nueva norma se ha caracterizado por la participación y dialogo entre países y representantes de la sociedad, es decir, industria, gobierno, consumidores, trabajadores, ONG, entre otros.
Es el mayor foro internacional de normalización, estuvo constituido por 99 países (69 en desarrollo), 450 expertos y 42 organizaciones internacionales; ISO 26000 es resultado del consenso y cuenta con una muy alta legitimidad internacional, lo cual quedó demostrado en Suiza, donde hubo coincidencia de los participantes de contar con un estándar aceptado a nivel mundial para implementar la responsabilidad social.
Uno de los principales valores de ISO 26000 radica en la gobernanza de la organización, derechos humanos, prácticas laborales, medio ambiente, prácticas justas de operación, consumidores, participación activa y desarrollo de la comunidad.
Muchas empresas han visto en la norma una guía que les ayuda a enfocarse en otras áreas que antes no habían considerado, ISO 26000 propone realizar un proceso de debida diligencia, esto implica realizar un análisis exhaustivo de los reales y potenciales impactos de carácter económico, social y ambiental con el objetivo de evitarlos o disminuirlos.
En el Centro Vincular de Chile, organización que lidera desde el año 2001, se ha notado que las empresas realmente interesadas en incluir la Responsabilidad Social en su gestión, este enfoque de debida diligencia les hace sentido y por eso toman la decisión de usar esta norma.
En el foro quedó de manifiesto la utilidad de la norma para varias empresas, pues es una herramienta que les permite funcionar equilibrando las tres líneas base: la sostenibilidad económica, ambiental y social.
Esta norma se aplica en todo el mundo, sobre todo países en desarrollo, esta norma debe difundirse aún más, 60 países han adoptado el estándar y 20 más consideran hacerlo posteriormente, otro dato importante es que de los 74 países que respondieron una encuesta, 59% cree que el interés por esta norma cada día es mayor.
En base a estos resultados y experiencias, se demuestra que la norma ISO 26000 ofrece un camino transparente para avanzar en la gestión socialmente responsable y garantizar la sostenibilidad y competitividad de las organizaciones.
Fuente:Noticisanet.mx