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La diversificación económica y el empoderamiento de las mujeres son claves para lograr un entorno comercial más justo y eficiente, según lo expresado por los oradores que intervinieron en varias sesiones del Examen Global de la Ayuda para el Comercio el 3 y el 4 de julio. La economía mundial ofrece muchas oportunidades para que las empresas crezcan, pero aún queda mucho por hacer en sectores como las subvenciones a la pesca a fin de preservar los recursos y lograr que los beneficios del comercio lleguen a más personas, acordaron los panelistas.
Deben hacerse más esfuerzos para garantizar que la economía mundial satisfaga mejor las necesidades de las partes interesadas más desfavorecidas, incluidos países vulnerables, comerciantes de mujeres y jóvenes, dijeron los oradores el Día 2 del Examen Global de la Ayuda para el Comercio. La sesión plenaria comenzó el día con una discusión sobre cómo un acuerdo de subsidios de pesca de la OMC es importante para salvaguardar y diversificar los recursos económicos para las comunidades costeras y para las generaciones futuras.
"Las reservas mundiales de peces se están agotando. Según la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), el 33% de las poblaciones mundiales están sobreexplotadas, y la mayoría del resto está en sus límites. Esto debería preocuparnos a todos," Director de la OMC El general Roberto Azevêdo dijo en el plenario. "Las poblaciones agotadas significan una actividad económica agotada para las comunidades costeras, y millones de personas en todo el mundo perderán sus medios de subsistencia. Hay una necesidad urgente de garantizar el uso sostenible de los recursos de los océanos para las generaciones futuras".
Los miembros de la OMC pueden hacer una importante contribución al concluir con éxito las negociaciones para nuevas reglas globales que frenarán los subsidios perjudiciales a la pesca, agregó la DG Azevêdo, enfatizando la fecha límite de fin de 2019 para un acuerdo. Los negociadores se encuentran actualmente bajo una intensa presión en medio de los complejos problemas relacionados con la gestión de la pesca y el desarrollo sostenible, dijo, y las complejidades seguramente volverán a surgir después de que finalmente se acuerden las nuevas reglas de subsidios a medida que los miembros se enfrentan a los desafíos de cumplimiento.
"Esta es una ocasión importante para hacer un balance de la asistencia pesquera que ya se está brindando bilateralmente y por medio de instituciones internacionales y considerar qué otra cosa sería necesaria para ayudar con la implementación de nuevas reglas", dijo la DG Azevêdo. "Por supuesto, un nuevo acuerdo de la OMC sobre subsidios a la pesca por sí solo no puede abordar todo el espectro de problemas relacionados con la sostenibilidad de la pesca a largo plazo, pero podemos hacer una contribución importante. Entonces, seamos ambiciosos con esa contribución", dijo.
El enviado especial de las Naciones Unidas para los océanos, Peter Thomson, también subrayó la urgencia de entregar un acuerdo de subsidios de pesca de la OMC. Las nuevas reglas son esenciales para tener pesquerías saludables, que a su vez son esenciales para una economía "azul" sostenible, dijo.
Un panel de oradores pasó a discutir las necesidades de los países en desarrollo y menos adelantados y la asistencia técnica que puede estar disponible para mejorar la implementación de un futuro acuerdo de la OMC sobre subsidios a la pesca. Representantes de Myanmar, Liberia y Samoa dieron su perspectiva sobre los desafíos que enfrentan sus países para combatir las prácticas de pesca nocivas y el trato especial y diferenciado que desean en las negociaciones en curso.
Diversificación económica: enfoque regional.
La necesidad de apoyar la diversificación económica y el empoderamiento se abordaron en cuatro sesiones temáticas separadas desde diferentes perspectivas regionales: África, Asia y el Pacífico, América Latina y el Caribe y el Banco Islámico de Desarrollo.
Los panelistas discutieron el impacto previsto del nuevo acuerdo de la Zona Africana de Libre Comercio Continental (ACFTA, por sus siglas en inglés), que entró en vigor el 30 de mayo después de que la 22ª ratificación fue depositada en la Unión Africana y su potencial para facilitar la diversificación económica y el empoderamiento. Stephen Karingi, de la Comisión Económica para África de la ONU, dijo que el nuevo ACFTA podría aumentar el comercio interafricano en un 15-25%, con dos tercios de las ganancias en el comercio de productos industriales. Esta última cifra es importante para los países africanos que buscan reducir su dependencia de los productos básicos en bruto y proporciona un buen incentivo para las políticas que promueven la industrialización y la diversificación, dijo.
En la sesión focal de Asia y el Pacífico, el Banco Asiático de Desarrollo (ADB) lanzó el informe de Ayuda para el Comercio para Asia y el Pacífico 2019. El informe destacó el notable progreso de la región de Asia y el Pacífico y las transformaciones estructurales que atravesó, en particular el cambio De la agricultura de subsistencia a la manufactura y servicios. El informe reconoció el importante papel del comercio internacional y la inversión extranjera directa en esta diversificación económica y desarrollo. El informe señaló además que se debe hacer más para compartir los beneficios del comercio de manera equitativa, y para crear un campo de juego nivelado para las pequeñas empresas y las mujeres empresarias. Samoa, Nepal y Camboya compartieron su experiencia de cómo la Ayuda para el Comercio los ayudó a abordar los desafíos que enfrentan, como resultado de los desastres naturales y el cambio climático, al mejorar la conectividad, la infraestructura y la capacidad del lado de la oferta de estos países.
La sesión organizada por el Banco Islámico de Desarrollo (BID), un colaborador activo de la iniciativa de Ayuda para el Comercio desde su inicio en 2006, destacó la correlación entre el desarrollo comercial, el crecimiento sostenible y las cadenas de valor mundiales. Mohammed Faiz Shau Hamid del BID destacó la necesidad de identificar ventajas competitivas de la industria, aumentar la participación en las cadenas de valor globales y maximizar el valor agregado en sectores como el de la transición de un modelo basado en las exportaciones de productos básicos a las exportaciones de productos manufacturados. como el turismo. A pesar del progreso, los panelistas destacaron los múltiples desafíos comunes que enfrentan los PMA: cumplir con los requisitos estándar en los mercados de destino; la competitividad de los productos de fabricación local; restricciones institucionales y legales; y los altos costos de la energía que obstaculizan la capacidad de los países pobres para aumentar su participación en el comercio mundial.
Este último fue discutido desde una perspectiva de América Latina y el Caribe (ALC). Diego Aulestia, embajador de Ecuador ante la OMC, destacó que la región se mantiene rezagada en términos de comercio a pesar de su potencial, que representa solo el 5,5% del comercio mundial de bienes y menos del 3% del comercio de servicios. El desafío es determinar qué queremos vender y cómo queremos aumentar nuestra participación en el comercio mundial, dijo. Esta sesión examinó el progreso de los países de ALC y cómo en un entorno global desafiante ha aprovechado las herramientas del Acuerdo de Facilitación del Comercio de la OMC, como los programas de Ventanillas Únicas de Comercio Exterior (VUCE), Operador Económico Autorizado (AEO) y Coordinación Gestión de fronteras para mejorar su desempeño comercial. Melvin Enrique Redondo, secretario general de la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (SIECA), citó como ejemplo el éxito de la integración aduanera centroamericana, que ha reducido los tiempos transfronterizos de 40 a seis minutos en los últimos años.
La facilitación del comercio también se identificó como un motor para la diversificación en una sesión organizada por Trademark East Africa (TMEA), que mostró los Sistemas Regionales de Seguimiento de Carga Electrónica (RECTS) a lo largo del Corredor Norte (NC), la ruta de transporte más transitada e importante en el Este y África Central, que proporciona una puerta de entrada a través de Kenia a las economías sin litoral de Uganda, Ruanda, Burundi y el este de la República Democrática del Congo, así como a Sudán del Sur. El sistema ha ayudado a reducir el tiempo y el costo del comercio de 18-21 días a 6-8 días para el tránsito de carga desde el puerto de Mombasa a Kigali y de 16-18 días desde Mombasa a Kampala. También ha aumentado los ingresos para los gobiernos a través de una menor desviación en el tránsito y mejores prácticas de gestión de riesgos a través de los controles fronterizos, además de permitir que el sector privado mantenga un monitoreo en tiempo real de su carga en tránsito.
La sesión participó con mujeres comerciantes de la región de la Comunidad de África Oriental (EAC) para ver cómo, de acuerdo con la Política de Asistencia Internacional Feminista de Canadá, TMEA implementa actividades que tienen como objetivo mejorar la representación de las mujeres en la toma de decisiones e influir en las políticas y regulaciones para una seguridad y género. Entorno comercial receptivo.
Empoderamiento de las mujeres.
Al hablar en una sesión sobre "Mujeres empresarias: hacer realidad la declaración de Buenos Aires" en el Día 1, la DG Azevêdo se centró en el empoderamiento de las mujeres como medio para asegurar su plena participación en el comercio mundial. La sesión hizo un balance de los avances y experiencias nacionales desde diciembre de 2017, cuando más de 100 miembros de la OMC firmaron la Declaración sobre el comercio y el empoderamiento económico de las mujeres en la 11ª Conferencia Ministerial en Buenos Aires.
"Si queremos aprovechar todas las oportunidades que ofrece la economía global, debemos asegurarnos de que las mujeres estén plenamente integradas en esos esfuerzos. Las empresarias ya desempeñan un papel vital en muchas economías. Según algunas estimaciones, una tercera parte de todas las pequeñas y medianas empresas en los países en desarrollo están dirigidas por mujeres ", dijo la DG Azevêdo. "Sin embargo, persisten muchas barreras para su plena participación en la economía global, ya sean menos derechos legales o una representación insuficiente de la política”.
Eliminar estas barreras puede tener un tremendo impacto social y económico. Un estudio de McKinsey estima que cerrar la brecha de género podría agregar al menos 12 billones de USD al PIB global para 2025. Esto es equivalente al PIB actual de Japón, Alemania y el Reino Unido combinados.
Para Ann Linde, Ministra de Comercio Exterior de Suecia, es alentador que el tema del comercio y el género esté cada vez más en la agenda, pero queda un largo camino por recorrer. El primer paso podría ser la recopilación sistemática de datos desagregados por género para informar mejor a los gobiernos en la formulación de normas de comercio con igualdad de género.
Fuente: wto.org
