El turismo sanitario o de salud estará certificado por una norma ISO. Un grupo de expertos de Aenor está trabajando para regular la calidad y la seguridad del paciente en este sector.
Así lo ha adelantado Marta Serrano, gerente de Sanidad de Aenor (entidad encargada de emitir estos títulos) durante la II Jornada de Calidad Hospitalaria organizada por la Federación Nacional de Clínicas Privadas (FNCP). Aenor ya está manos a la obra y trabajando sobre esta norma con un grupo de especialistas para regular y dar seguridad a este campo, aunque, de momento, se desconoce cuándo verá la luz. Otra de las propuestas que va a poner en marcha la agencia acreditadora afectará a los servicios administrativos en sanidad, que también se analizarán a través de una norma ISO.
1.500 certificaciones de calidad en sanidad
En general en todos los campos, España es el cuarto país europeo con mayor número de certificaciones de calidad. Pero, si se atiende solo y exclusivamente al ámbito sanitario, Aenor ha emitido más de 1.500 títulos, tanto a entidades públicas como privadas, siendo la ISO 9001 la que más acogida ha tenido (más del 65 por ciento de las certificaciones en sanidad son bajo esta norma).
La normalización en sanidad empezó en 1978, pero no fue hasta diez años después cuando las organizaciones de este sector empezaron a tomar conciencia de la necesidad de disponer de normas para el cumplimiento de requisitos esenciales y comunitarios dentro de este campo.
El paciente es la razón de ser y la prioridad, por lo que todas las actividades han de orientarse a dar respuesta a sus necesidades y aumentar su satisfacción. Para alcanzar la excelencia en sanidad, Aenor trabaja en diez comités diferentes que estudian la calidad y la seguridad en diferentes procesos sanitarios (transporte, infecciones, teleasistencia, atención hospitalaria, Odontología, etcétera).
En términos generales, una regulación normativa en sanidad permite visualizar y mejorar los flujos de trabajo; sistematizar las actividades en base a las necesidades del paciente; desarrollar una planificación estratégica; gestionar el trabajo de la organización; estimula la toma de decisiones en función de los resultados; y mejora la imagen de la organización frente a la competencia y ante sus profesionales y pacientes. No obstante, estos títulos requieren tiempo para la redacción de los procedimientos; necesidad de documentación; introducción de cambios en los hábitos de trabajo y necesidad de controlar y revisar prácticas asistenciales.
De la ISO 9000:2008 a la 2015
Otra de las novedades que se ha puesto sobre en esta jornada es la transformación que está viviendo la norma ISO 9000:2008 a la 2015, donde no se incluirá solo la certificación de productos sanitarios, sino también los servicios, mezclando los criterios de riesgos y oportunidades y haciendo una evaluación del desempeño.
Además de explicar esto, las instituciones sanitarias españolas (tanto públicas como privadas) hacen poco uso del título europeo UNE-EN15224. Siendo un certificado específico para los servicios sanitarios que complementa -y no excluye- a la ISO. Esta norma está orientada a la mejora de la calidad del servicio hospitalario,y la seguridad del paciente, haciendo eficientes los recursos, mejorando el flujo de comunicación e información en los centros, midiendo los objetivos de calidad y satisfaciendo las necesidades tanto de los pacientes, como del personal.
además de ello, existe una clara necesidad de impulsar la gestión de riesgos para la seguridad del paciente desde una visión global. Para ello, la entidad que representa han desarrollado un modelo de evaluación de la percepción de la gestión de la seguridad de estos usuarios; una evaluación objetiva del sistema; priorizando objetivos y acciones por áreas, y desarrollado una cultura de gestión de riesgos; mediante la implementación de estrategias de mejora.
Fuente: reaccionmedica