Once grandes bancos mundiales han anunciado su compromiso de desarrollar herramientas de análisis e indicadores para fortalecer su evaluación y divulgación sobre los riesgos y oportunidades relacionados con el clima junto con la Iniciativa Financiera de ONU Medio Ambiente. El grupo de bancos, con un capital de más de 7 billones de dólares, incluye a algunos como ANZ, Barclays, Bradesco, Citi, Itaú, National Australia Bank, Royal Bank of Canada, Santander, Standard Chartered, TD Bank Group y UBS.
La Iniciativa Financiera de ONU Medio Ambiente es una alianza entre ONU Medio Ambiente y el sector financiero global creada tras la Cumbre de la Tierra de 1992, y tiene la finalidad de promover una financiación sostenible. Más de 200 instituciones financieras, incluyendo bancos, aseguradoras e inversionistas, colaboran con ONU Medio Ambiente para comprender los desafíos ambientales, cómo abordarlos activamente y la importancia de financiar en este sector.
El pasado mes fueron publicadas las recomendaciones finales del Grupo de Trabajo sobre Divulgación de Información Financiera relacionada con el Clima, del Consejo de Estabilidad Financiera. Tras dicha publicación los bancos no solo reciben con beneplácito los lineamientos, sino que son los primeros de su industria en adoptar elementos clave de este marco innovador.
El Consejo de Estabilidad Financiera, presidido por el gobernador del Banco de Inglaterra, Mark Carney, encargó al Grupo de Trabajo que desarrollará lineamientos para divulgaciones sobre riesgos financieros en relación al clima para que fueran utilizados por compañías, inversionistas, prestamistas y aseguradores.
Lo que se pretende es aumentar la cantidad de información confiable sobre la exposición de las instituciones financieras a esta clase de riesgos y oportunidades, para fortalecer la estabilidad del sistema financiero y contribuir a impulsar inversiones favorables al clima.
El Grupo de Trabajo publicó a finales del mes de junio las recomendaciones finales, que fueron presentadas al G20 la semana pasada. Las recomendaciones son bien recibidas tanto por las instituciones financieras como por la sociedad civil, ya que el papel de esta industria en el cumplimiento de los objetivos del Acuerdo de París se hace cada vez más claro.
El primer proyecto de implementación de las recomendaciones pone a la vanguardia a estos once miembros de la Iniciativa Financiera de ONU Medio Ambiente. Los resultados de sus esfuerzos se harán públicos para alentar a los bancos en todo el mundo a adoptar los escenarios, modelos y enfoques desarrollados.
Fuente: agorarsc