El pasado 27 de junio se celebró por primera vez el Día de las Microempresas y las Pequeñas y Medianas Empresas. Dichas empresas, que cuentan con un número reducido de trabajadores (generalmente, menos de 250 personas) y un moderado volumen de facturación, son claves en la mayoría de las economías del mundo y desempeñan un papel fundamental en los países en desarrollo.
Según los datos del International Council for Small Business (ICSB), este tipo de negocios, representan más del 90 por ciento del total de empresas, generan entre el 60 y el 70 por ciento del empleo y son responsables del 50 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) a nivel mundial.
La Asamblea General, reconociendo la importancia de estas compañías, decidió declarar el 27 de junio el Día de las Microempresas y las Pequeñas y Medianas Empresas para concienciar acerca de su contribución al desarrollo sostenible.
Microempresas, pequeñas y medianas empresas, también conocidas como pymes, son responsables de una generación de empleo e ingresos importantes a nivel mundial y se las reconoce como un factor clave en la reducción de la pobreza y el fomento del desarrollo.
Las pymes tienden a emplear a una gran proporción de trabajadores pertenecientes a los sectores más vulnerables de la sociedad, como mujeres, jóvenes y personas de hogares desfavorecidos. En muchas zonas rurales, son casi la única fuente de empleo. Como grupo, estos pequeños negocios son el generador de ingresos más importante en la “base de la pirámide”.
Las posibilidades que generan, tanto a nivel económico como de otros tipos, pueden ser la respuesta a las necesidades sociales de muchas personas y servir de base para la inclusión.
A pesar de crear empleo, las microempresas y pymes hacen frente a muchas dificultades en su funcionamiento diario y crecimiento. El acceso a financiación es uno de los obstáculos principales que afectan de manera desproporcionada a estos pequeños negocios. Según el Banco Mundial, entre 200 y 245 millones de empresas, formales e informales, no tienen acceso a los préstamos o descubiertos bancarios que necesitan, o disponen de financiación, pero aun así el acceso es complicado. De ellas, más del 90 por ciento son microempresas y pymes.
Mediante el fomento de la innovación, creatividad y el trabajo decente para todos, este tipo de empresas son claves en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Por su lado, las iniciativas para facilitar el acceso a financiación en los sectores clave de las economías nacionales son importantes para la aplicación de los ODS. En concreto, las metas 8.3 y 9.3 piden que se mejore el acceso de la pymes a servicios financieros. A su vez, estas empresas son un elemento importante en la implementación del ODS 8 (trabajo decente y crecimiento económico) y ODS 9 (industria, innovación e infraestructura).
La Asamblea General invita a todos los Estados Miembros, las organizaciones del sistema de las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales y regionales, así como a la sociedad civil, incluidas las organizaciones no gubernamentales, el mundo académico, los particulares y otros interesados, a que celebren el Día de manera adecuada y de conformidad con las prioridades nacionales, a fin de sensibilizar a la población sobre su contribución al desarrollo sostenible.
Fuente: Naciones Unidas